En el Green Point de Ciudad del Cabo (un estadio olvidable en el Río de la Plata a esta altura), Países Bajos venció a Uruguay por 3-2 en un partido tan emotivo como polémico y es el primer finalista de Sudáfrica 2010. La "Celeste" estuvo a la altura de las circunstancias y de no ser por la vergonzosa actuación de la terna precedida por el uzbeko Ravshan Irmatov, quizás otra sería la historia.
El partido era de un trámite muy parejo cuando Giovanni van Bronckhorst metió un golazo de otro partido (el de Arie Haan vs. Italia en Argentina 1978). El árbitro uzbeko Ravshan Irmatov no cobró una falta evidente de van Bommel en el mediocampo. Y van Bronckhorst desde muy lejos sacó un bombazo que dio en el poste izquierdo de Muslera (el arquero hizo un gran esfuerzo pero era imposible de atajar) antes de ingresar al arco (18').
Sobre el final del primer tiempo, Uruguay pagó de la misma forma. Diego Forlán amagó un pase a Cavani, enganchó y sacó un zurdazo tremendo (es derecho) que se metió por el medio del arco neerlandés con cierta responsabilidad de Stekelenburg (41').
En la segunda parte, el conjunto "Charrúa" era claro dominador y Países Bajos pasaba momentos de sosobra. Álvaro Pereira disparó desde lejos con el arco vacío (Stekelenburg salió a achicar frente a Cavani) y van Bronckhorst llegó justo para enviar la pelota al córner. Momentos después, Maarten Stekelenburg tuvo una respuesta notable ante un tiro libre de Forlán.
Sin embargo, fue la "Naranja" la que logró adelantarse. En una incursión por la izquierda, Wesley Sneijder enganchó y colocó su disparo al lado del poste izquierdo de Muslera (70'). Claro, el gol no debió ser convalidado porque Robin van Persie estaba adelantado cuando intentó jugar la pelota (desastrosa labor del línea Kochkarov).
Los conducidos por Bert van Marwijk aprovecharon su momento y marcaron el tercer gol. Dirk Kuyt centró desde la izquierda y Arjen Robben suspendido en el aire (casi de básquetbol) metió un cabezazo junto al palo derecho de Fernando Muslera (73').
Uruguay nunca se rindió pese al resultado negativo y ya con Abreu y Sebastián Fernández (entraron por Álvaro Pereira y un lesionado Forlán respectivamente), consiguió descontar y le puso aún más suspenso y emotividad a un partido que por el contexto ya tenía esos condimentos.
Con el tiempo cumplido, Walter Gargano jugó rápido un tiro libre para Maxi Pereira, quien metió un golazo de zurda colocando el balón al lado del poste izquierdo de Stekelenburg (90').
Restaron un par de minutos en los que la "Celeste" casi consigue empatar y forzar una prórroga. Finalmente, no pudieron lograrlo pero estos jugadores nunca dejaron de "creer". Y eso es lo mas importante porque lograron devolverle la esperanza a todo el pueblo uruguayo.
Uruguay jugará por el tercer puesto y Países Bajos alcanzó su tercera final soñando con quitarse el mote de "campeón sin corona". El rival de ambos saldrá del duelo entre Alemania y España en la otra semifinal.
El partido era de un trámite muy parejo cuando Giovanni van Bronckhorst metió un golazo de otro partido (el de Arie Haan vs. Italia en Argentina 1978). El árbitro uzbeko Ravshan Irmatov no cobró una falta evidente de van Bommel en el mediocampo. Y van Bronckhorst desde muy lejos sacó un bombazo que dio en el poste izquierdo de Muslera (el arquero hizo un gran esfuerzo pero era imposible de atajar) antes de ingresar al arco (18').
Sobre el final del primer tiempo, Uruguay pagó de la misma forma. Diego Forlán amagó un pase a Cavani, enganchó y sacó un zurdazo tremendo (es derecho) que se metió por el medio del arco neerlandés con cierta responsabilidad de Stekelenburg (41').
En la segunda parte, el conjunto "Charrúa" era claro dominador y Países Bajos pasaba momentos de sosobra. Álvaro Pereira disparó desde lejos con el arco vacío (Stekelenburg salió a achicar frente a Cavani) y van Bronckhorst llegó justo para enviar la pelota al córner. Momentos después, Maarten Stekelenburg tuvo una respuesta notable ante un tiro libre de Forlán.
Sin embargo, fue la "Naranja" la que logró adelantarse. En una incursión por la izquierda, Wesley Sneijder enganchó y colocó su disparo al lado del poste izquierdo de Muslera (70'). Claro, el gol no debió ser convalidado porque Robin van Persie estaba adelantado cuando intentó jugar la pelota (desastrosa labor del línea Kochkarov).
Los conducidos por Bert van Marwijk aprovecharon su momento y marcaron el tercer gol. Dirk Kuyt centró desde la izquierda y Arjen Robben suspendido en el aire (casi de básquetbol) metió un cabezazo junto al palo derecho de Fernando Muslera (73').
Uruguay nunca se rindió pese al resultado negativo y ya con Abreu y Sebastián Fernández (entraron por Álvaro Pereira y un lesionado Forlán respectivamente), consiguió descontar y le puso aún más suspenso y emotividad a un partido que por el contexto ya tenía esos condimentos.
Con el tiempo cumplido, Walter Gargano jugó rápido un tiro libre para Maxi Pereira, quien metió un golazo de zurda colocando el balón al lado del poste izquierdo de Stekelenburg (90').
Restaron un par de minutos en los que la "Celeste" casi consigue empatar y forzar una prórroga. Finalmente, no pudieron lograrlo pero estos jugadores nunca dejaron de "creer". Y eso es lo mas importante porque lograron devolverle la esperanza a todo el pueblo uruguayo.
Uruguay jugará por el tercer puesto y Países Bajos alcanzó su tercera final soñando con quitarse el mote de "campeón sin corona". El rival de ambos saldrá del duelo entre Alemania y España en la otra semifinal.
Morir de pie y con honor
Uruguay nunca se sintió menos que su rival y eso quedó probado en el campo de juego. Los dirigidos por el "Maestro" Tabárez jugaron un partido de igual a igual frente a la "Naranja" de Bert van Marwijk e hicieron méritos para volver a una final mundialista tras 60 años (en aquél entonces un Grupo Final).
Uruguay no vendió cara la derrota, muy por lo contrario, siempre buscó el triunfo. Y estuvo a punto de conseguirlo con el encuentro igualado 1-1, momento en que un grosero error de la terna arbitral fue determinante en favor de Países Bajos.
No se puede decir que la "Celeste" haya cumplido una actuación digna, los de "Tabárez" hicieron un encuentro y un torneo (no terminó su actuación) espectacular. Uruguay debió jugar más partidos que cualquier otro equipo para poder llegar al Mundial y se terminó asegurando los siete partidos del torneo (aunque es obvio que prefieren jugar una final que el tercer puesto).
Este equipo logró la participación mundialista más importante en los últimos 40 años para los "Charrúas". Y lo hizo en base de la humildad y el hambre de gloria que tienen los jugadores.
A Uruguay por lesiones y suspensiones le faltaron Luis Suárez, Jorge Fucile, Diego Lugano y Nicolás Lodeiro. Los primeros tres son titulares fundamentales en el equipo y Lodeiro es un jugador de recambio muy importante. Sin embargo, sus compañeros lograron suplirlos con mucho corazón.
Ahora, a la "Celeste" le resta jugar el partido del tercer puesto. A priori, el encuentro que nadie quiere jugar, pero sería muy importante para el fútbol uruguayo que la Selección gane ese partido y vuelva a un podio mundialista tras 60 años.
Uruguay hizo méritos para estar en la final de Sudáfrica 2010 y se vio privado de esa posibilidad, de todas formas, para muchos ya salió campeón. Y no se trata de ser conformistas, sino, de reconocer a un plantel que dejó todo y mucho más.
Al fin y al cabo, muchos vinieron a ver a Argentina, Brasil, España y Países Bajos (entre otros) y se encontraron con la "Celeste". Así que... ¡Gloria eterna para Uruguay 2010!.
Traigan árbitros, estos no están a la altura
El uzbeko Ravshan Irmatov y sus colaboradores desde el primer momento sancionaron en favor de la "Naranja". El línea kirguís Bakhadyr Kochkarov (¿qué mérito puede tener un árbitro de Kirguistán para dirigir en un Mundial?) cobró tres posiciones adelantadas inexistentes:
-La primera se la marcó a Álvaro Pereira, quien llegó hasta el fondo y habilitó a un solitario Diego Forlán (los defensores corrían de atrás).
-La segunda se la marcó a Edinson Cavani, quien con un notable desdoblamiento para desmarcarse se iba solo camino al arco neerlandés.
-La tercera (y más grosera) se la marcó a Diego Forlán, quien quedaba mano a mano con Maarten Stekelenburg en una situación en la que sabemos que "Cachavacha" no falla.
En el inicio del primer gol de Países Bajos, van Bommel le pegó una terrible (y temible) patada a Walter Gargano que era para roja directa pero que el árbitro obvió.
Además, la terna no cobró un claro penal de Giovanni van Bronckhorst sobre Edinson Cavani por un codazo cuando iba media hora de juego, que Irmatov y Kochkarov no vieron pese a estar bien posicionados como para observar la falta.
En el segundo tiempo y en un momento clave, el árbitro uzbeko y el mismo línea (ya da para pensar) permitieron el segundo gol neerlandés marcado por Sneijder pese a que Robin van Persie estaba en posición adelantada e intentó jugar el balón (a "Tacuara" Cardozo le cobraron offside por lo mismo cuando Haedo Valdez ponía en ventaja a Paraguay sobre España).
Para colmo, el árbitro cobró una mano irreal de Cavani y no sancionó otra de Joris Mathijsen en la medialuna del área grande sobre el final del partido. También es para destacar que si Ravshan Irmatov hubiese sido igual de estricto con los jugadores neerlandeses como lo fue con los uruguayos (les permitió pegar demasiado), Heitinga, Boulahrouz y van Bommel no podrían haber concluido el encuentro.
FIFA tendrá que replantearse muchas cosas. Evidentemente, muchos árbitros de esta Copa del Mundo no estuvieron a la altura del evento. Y en cuanto a la negación del uso de la tecnología, es increíble de que las propias cámaras la entidad madre del fútbol sean las que delaten las paupérrimas actuaciones arbitrales.
Por otra parte, parece una burla que la solución que FIFA propone a las jugadas polémicas sea no repetir las imágenes en las pantallas gigantes de los estadios, mientras que todo el mundo (literalmente) puede observar los fallos erróneos por televisión.
Uruguay no vendió cara la derrota, muy por lo contrario, siempre buscó el triunfo. Y estuvo a punto de conseguirlo con el encuentro igualado 1-1, momento en que un grosero error de la terna arbitral fue determinante en favor de Países Bajos.
No se puede decir que la "Celeste" haya cumplido una actuación digna, los de "Tabárez" hicieron un encuentro y un torneo (no terminó su actuación) espectacular. Uruguay debió jugar más partidos que cualquier otro equipo para poder llegar al Mundial y se terminó asegurando los siete partidos del torneo (aunque es obvio que prefieren jugar una final que el tercer puesto).
Este equipo logró la participación mundialista más importante en los últimos 40 años para los "Charrúas". Y lo hizo en base de la humildad y el hambre de gloria que tienen los jugadores.
A Uruguay por lesiones y suspensiones le faltaron Luis Suárez, Jorge Fucile, Diego Lugano y Nicolás Lodeiro. Los primeros tres son titulares fundamentales en el equipo y Lodeiro es un jugador de recambio muy importante. Sin embargo, sus compañeros lograron suplirlos con mucho corazón.
Ahora, a la "Celeste" le resta jugar el partido del tercer puesto. A priori, el encuentro que nadie quiere jugar, pero sería muy importante para el fútbol uruguayo que la Selección gane ese partido y vuelva a un podio mundialista tras 60 años.
Uruguay hizo méritos para estar en la final de Sudáfrica 2010 y se vio privado de esa posibilidad, de todas formas, para muchos ya salió campeón. Y no se trata de ser conformistas, sino, de reconocer a un plantel que dejó todo y mucho más.
Al fin y al cabo, muchos vinieron a ver a Argentina, Brasil, España y Países Bajos (entre otros) y se encontraron con la "Celeste". Así que... ¡Gloria eterna para Uruguay 2010!.
Traigan árbitros, estos no están a la altura
El uzbeko Ravshan Irmatov y sus colaboradores desde el primer momento sancionaron en favor de la "Naranja". El línea kirguís Bakhadyr Kochkarov (¿qué mérito puede tener un árbitro de Kirguistán para dirigir en un Mundial?) cobró tres posiciones adelantadas inexistentes:
-La primera se la marcó a Álvaro Pereira, quien llegó hasta el fondo y habilitó a un solitario Diego Forlán (los defensores corrían de atrás).
-La segunda se la marcó a Edinson Cavani, quien con un notable desdoblamiento para desmarcarse se iba solo camino al arco neerlandés.
-La tercera (y más grosera) se la marcó a Diego Forlán, quien quedaba mano a mano con Maarten Stekelenburg en una situación en la que sabemos que "Cachavacha" no falla.
En el inicio del primer gol de Países Bajos, van Bommel le pegó una terrible (y temible) patada a Walter Gargano que era para roja directa pero que el árbitro obvió.
Además, la terna no cobró un claro penal de Giovanni van Bronckhorst sobre Edinson Cavani por un codazo cuando iba media hora de juego, que Irmatov y Kochkarov no vieron pese a estar bien posicionados como para observar la falta.
En el segundo tiempo y en un momento clave, el árbitro uzbeko y el mismo línea (ya da para pensar) permitieron el segundo gol neerlandés marcado por Sneijder pese a que Robin van Persie estaba en posición adelantada e intentó jugar el balón (a "Tacuara" Cardozo le cobraron offside por lo mismo cuando Haedo Valdez ponía en ventaja a Paraguay sobre España).
Para colmo, el árbitro cobró una mano irreal de Cavani y no sancionó otra de Joris Mathijsen en la medialuna del área grande sobre el final del partido. También es para destacar que si Ravshan Irmatov hubiese sido igual de estricto con los jugadores neerlandeses como lo fue con los uruguayos (les permitió pegar demasiado), Heitinga, Boulahrouz y van Bommel no podrían haber concluido el encuentro.
FIFA tendrá que replantearse muchas cosas. Evidentemente, muchos árbitros de esta Copa del Mundo no estuvieron a la altura del evento. Y en cuanto a la negación del uso de la tecnología, es increíble de que las propias cámaras la entidad madre del fútbol sean las que delaten las paupérrimas actuaciones arbitrales.
Por otra parte, parece una burla que la solución que FIFA propone a las jugadas polémicas sea no repetir las imágenes en las pantallas gigantes de los estadios, mientras que todo el mundo (literalmente) puede observar los fallos erróneos por televisión.
Cambios:
URU: Sebastián Abreu por Álvaro Pereira (78') y Sebastián Fernández por Diego Forlán (84')
PBJ: Rafael van der Vaart por Demy de Zeeuw (45' ET) y Eljero Elia por Arjen Robben (89')
Amonestaciones:
Maximiliano Pereira (URU) 21', Martín Cáceres (URU) 29', Wesley Sneijder (PBJ) 29', Khalid Boulahrouz (PBJ) 78' y Mark van Bommel (PBJ) 90'
Estadísticas:
-Países Bajos jugará su tercera final en la historia del Mundial.
-Diego Forlán por primera vez capitaneó a su Selección y se convirtió en el cuarto capitán más veterano de Uruguay en la historia del Mundial (31 años y 48 días). El récord pertenece a Obdulio Varela (36 años y 279 días).
-Arjen Robben marcó el gol 2200 en la historia del Mundial.
-Giovanni van Bronckhorst se convirtió en el goleador más veterano de Países Bajos en un Mundial (35 años y 151 días). El récord era de Rob Rensenbrink.
-Giovanni van Bronckhorst se convirtió en el defensor más veterano que marca en un Mundial (35 años y 151 días). El récord era del iraní Yahya Golmohammadi.
-Giovanni van Bronckhorst es el tercer capitán neerlandés que marca en la historia del Mundial. Los anteriores fueron Johan Cruyff y Ruud Gullit.
-Por quinta vez marcaron los dos capitanes (Diego Forlán y Giovanni van Bronckhorst) en la historia del Mundial.
-Un equipo europeo por primera vez ganará la Copa del Mundo fuera de su continente en la historia del Mundial.
-El árbitro Ravshan Irmatov igualó al mexicano Benito Archundia y al argentino Horacio Elizondo en mayor cantidad de partidos dirigidos en un mismo Mundial (5).
-Diego Forlán por primera vez capitaneó a su Selección y se convirtió en el cuarto capitán más veterano de Uruguay en la historia del Mundial (31 años y 48 días). El récord pertenece a Obdulio Varela (36 años y 279 días).
-Arjen Robben marcó el gol 2200 en la historia del Mundial.
-Giovanni van Bronckhorst se convirtió en el goleador más veterano de Países Bajos en un Mundial (35 años y 151 días). El récord era de Rob Rensenbrink.
-Giovanni van Bronckhorst se convirtió en el defensor más veterano que marca en un Mundial (35 años y 151 días). El récord era del iraní Yahya Golmohammadi.
-Giovanni van Bronckhorst es el tercer capitán neerlandés que marca en la historia del Mundial. Los anteriores fueron Johan Cruyff y Ruud Gullit.
-Por quinta vez marcaron los dos capitanes (Diego Forlán y Giovanni van Bronckhorst) en la historia del Mundial.
-Un equipo europeo por primera vez ganará la Copa del Mundo fuera de su continente en la historia del Mundial.
-El árbitro Ravshan Irmatov igualó al mexicano Benito Archundia y al argentino Horacio Elizondo en mayor cantidad de partidos dirigidos en un mismo Mundial (5).
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